All posts /Skate Stories

Ray Barbee
— Cuando el skate
se convierte en música

Mismo flow, diferente escenario

Ray Barbee playing live at El Sótano in Madrid during the Moments Festival — calm, flow and pure connection between skate and music.

Moments Festival, la noche de Ray Barbee en El Sótano (Madrid) fue más que un concierto: fue una sesión de skate sin tabla.

Entre luces cálidas y público cercano, Ray transformó el escenario en un lugar donde la música, el arte y el skate se funden en una ronda de beats enalzados como los nocomplies en su famosa ronda en el Ban This de Powel Peralta.

Escuchando a Ray Barbee en Madrid

Música, clase, estilo y madurez con la misma sonrisa de siempre

30 años despues de nuevo ray

El pasado día 16 de octubre , nos acercamos a Madrid para ver el concierto de Ray Barbee.
Antonio y yo nos paseamos por La Latina con dos tablas bajo el brazo, camino a la sala El Sótano, comentando como no el estilazo de Barbee que nos ha acompañado toda la vida.

Calle de las Maldonadas, 6,
Centro, 28005 / Madrid

Hace más de treinta años, mucho antes de conocernos, ya admirábamos los dos las líneas de Ray Barbee, su estilo, la clase y ese flow que sigue siendo único.

Aún hoy tratamos de hacernos con esa linea entera del Ban This de Powell Peralta.

Al llegar a la zona se iban viendo caras conocidas que, al menos a mí, siendo poco social, me sonaban de skateparks, el Escombro D.I.Y o algina sesion compartida. Skaters de otra época que todavía seguimos aquí.

Antonio y yo entramos los primeros, no había cola, lo cual me sorprendió mucho dada la relevancia que tiene Ray para todos nosotros. Bajamos al sótano. La sala es pequeña, la iluminación azul neón, casi más de clubo de after, se me hacía extraña para alojar a alguien como Ray Barbee, sabiendo el tipo de música que hace.

Ray Barbee signing skateboards for fans after his concert at El Sótano in Madrid — music and skate culture coming together.
Ahí estaba Ray.
Músico, fotógrafo, skater.
Solo, de pie en medio del sótano.
Tímido, sonriente, cercano
El otro día me preguntaron:

¿Cual fue tu primera impresión al verle?

Curiosamente lo que más me sorprendió fue su altura. No por ser especialmente alto, sino porque en mi cabeza seguía siendo un chaval sonriente, enlazando trucos con la misma ligereza de siempre. Como muchos de los que paramos años de patinar, me perdí su etapa adulta como skater, al verlo ahí me di cuenta del tiempo que había pasado.

Os dejo aquí Memory Screen: Ray Barbee

Un vídeo de Freeskatemag que repasa muchas de sus etapas de skate, por si tienes esa misma deuda pendiente.

Ray Barbee signing skateboards for the Nosebonk Crew before his concert at El Sótano in Madrid — music, skate and community on the same stage.
Llegamos los primeros 🙂 Antes del concierto, Ray Barbee nos firmó unas tablas a la Nosebonk Crew en El Sótano. Persona cercana, tranquila, de pocas palabras. Fue todo un honor.
Ray Barbee with members of the Nosebonk Crew after his concert at El Sótano in Madrid — skate community, friendship and gratitude.
Ray Barbee junto a Erik Ziegler y Antonio, parte de la Nosebonk Crew, tras el concierto en El Sótano. Más de 30 años tratando de copiar su línea de no-complies

Entablando conversacion

Antes del concierto, Ray Barbee nos firmó unas tablas a la Nosebonk Crew en El Sótano. Persona cercana, tranquila, de pocas palabras. Fue todo un honor. Nos preguntó por los modelos, una reissue y otra más reciente. Le comentamos que seguimos patinando, casi con 50 tacos, que de vez en cuando revisitamos su línea en el vídeo para intentar sacarla de nuevo. Tratando de evitar un momento demasiado groupie, debe de ser curioso ver cómo tu skate sigue inspirando de esa manera después de más de treinta años. Tratamos de no centrar la conversación demasiado en el patín; estábamos allí por su música.

El concierto

Barbee, toco para si mismo.
Verle sonreír y disfrutar fue el mejor regalo.

Lo que parecía improvisación se fue convirtiendo en un sonido perfectamente orquestado: truco tras truco, punteo tras punteo, construyendo y volviendo al bucle, creando e inspirando de esa manera que solo alguien como él es capaz.

Tema tras tema, solo en el escenario, todo instrumental, y aun así no se hizo monótono.
Ray sonreía, no miró una sola vez al público, completamente entregado al disfrute de tocar.

Esto me recordó a un momento del podcast «Beyond boards» donde hablaban de aquella frase mítica de Ban This, cuando Stacy Peralta le preguntó a Ray Barbee:

—¿Cuántos años llevas patinando?
—Seis años.
—¿Cuándo empezaste?
—Hace seis años.

En aquella entrevista Ray contaba que lo dijo riendose con calma, como diciendo: «Stacy deja ya de preguntarme, solo quiero patinar.»

Cuando terminó el concierto, nadie se movió. El silencio se quedó flotando un momento. Ray se bajó del escenario igual que quien termina una buena línea: tranquilo, sin gestos, con una sonrisa que decía “ya está”.

Gracias, Ray Barbee, por una noche más y una vida entera de inspiración.
— Erik Ziegler «Nosebonk»

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio